Acerca del recorrido

En este recorrido visitará tres hermosos y exquisitos palacios donde vivió la monarquía portuguesa, y que no están lejos de Lisboa.

 

Tras salir de Lisboa, el recorrido comienza con una parada en Queluz, a unos 12 kilómetros de Lisboa, para visitar el Palacio Nacional de Queluz, que fue residencia real de dos generaciones de monarcas. Es el monumento palaciego más representativo de la vida cortesana de la segunda mitad del siglo XVIII y contiene importantes colecciones de artes decorativas, la mayoría procedentes de la casa real.

 

A continuación, subiremos a la Sierra de Sintra para visitar un palacio de cuento de hadas, el Palacio da Pena, construido en dos épocas diferentes, que sirvió a monjes y después a un rey de Portugal, transformando radicalmente el paisaje de Sintra en lo que conocemos hoy.

En 1992, la UNESCO amplió las categorías del Patrimonio Mundial y añadió Paisaje Cultural.

Sintra fue clasificada como Patrimonio de la Humanidad en la categoría de «Paisaje Cultural» el 6 de diciembre de 1995, durante la 19ª Sesión del Comité del Patrimonio Mundial de la UNESCO, celebrada en Berlín.

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El viaje continúa hacia Mafra para visitar el Real Convento de Mafra, posteriormente rebautizado como Palacio Nacional de Mafra, una imponente obra del reinado de João V y el símbolo más importante de la arquitectura barroca en Portugal.

Clasificado como Monumento Nacional en 1910, fue finalista de las Siete Maravillas de Portugal en 2007 y ahora es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, habiendo ganado el título en 2020.

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Todos los monumentos se pueden visitar desde el interior, teniendo en cuenta su hora de cierre, si no quieres entrar a todos ellos siempre puedes hacer fotos desde el exterior. Esto puede cambiar el tiempo estimado para el final del recorrido.

 

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ADVERTENCIA: Algunos monumentos tienen un sistema de franjas horarias para adquirir las entradas, por lo que recomendamos comprarlas con antelación para garantizar la entrada y evitar colas.
La mayoría de las carreteras son de sentido único, por lo que puede haber algo de tráfico que afecte a la hora del recorrido. En algunas ocasiones también puede haber restricciones de tráfico, por lo que el recorrido puede cambiar en el último momento.